O outro 11 de Setembro
Para matar al
hombre de la paz
para golpear su
frente limpia de pesadillas
tuvieron que
convertirse en pesadilla,
para vencer al
hombre de la paz
tuvieron que
congregar todos los odios
y además los
aviones y los tanques,
para batir al
hombre de la paz
tuvieron que
bombardearlo hacerlo llama,
porque el hombre
de la paz era una fortaleza.
Para matar al
hombre de la paz
tuvieron que
desatar la guerra turbia,
para vencer al
hombre de la paz
y acallar su voz
modesta y taladrante
tuvieron que
empujar el terror hasta el abismo
y matar más para
seguir matando,
para batir al
hombre de la paz
tuvieron que
asesinarlo muchas veces
porque el hombre
de la paz era una fortaleza.
Para matar al
hombre de la paz
tuvieron que
imaginar que era una tropa,
una armada, una
hueste, una brigada,
tuvieron que
creer que era otro ejército,
pero el hombre de
la paz era tan sólo un pueblo
y tenía en sus
manos un fusil y un mandato
y eran necesarios
más tanques más rencores
más bombas más
aviones más oprobios
porque el hombre
de la paz era una fortaleza.
Para matar al
hombre de la paz
para golpear su
frente limpia de pesadillas
tuvieron que
convertirse en pesadilla,
para vencer al
hombre de la paz
tuvieron que
afiliarse siempre a la muerte
matar y matar más
para seguir matando
y condenarse a la
blindada soledad,
para matar al
hombre que era un pueblo
tuvieron que
quedarse sin el pueblo.
1 comentário:
Um grande Homem, dos maiores da nossa contemporaneidade, "dito" de maneira sublime por um dos maiores Poetas da Sua América Latina.
Comovente.
Obrigado
Abraço
Enviar um comentário